jueves, 29 de marzo de 2012

No miro las etiquetas de la comida para saber cuánto voy a engordar. Soy incapaz de pasar una semana sin tomar nada que no lleve salado o dulce y no voy a la peluquería una vez al mes para tener una preciosa melena de barbie. Reconozco que soy muy vergonzosa y me pongo nerviosa a veces, sobre todo cuando te acercas. No soy precisamente el modelo de hija ideal, muchas veces mi habitación está hecha un asco y provoco grandes problemas, tampoco soy la hermana perfecta, pero con un par de gritos funciono a la perfección. Nunca estoy quieta, me encanta reírme y no es nada difícil sacarme una sonrisa. Me gusta la moda aunque a veces no lo parezca y me gusta más el día que la noche. Cuando camino por la playa, a mi también se me mete arena en los zapatos, porque yo también soy persona, y si me pinchas, sangro. Pero eso sí, soy única en mi especie y eso me encanta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario